¿Qué es un embudo de conversión?
Un embudo de conversión también conocido como funnel, es el camino que recorren las personas (en este caso los clientes) cuando desean adquirir algo. Un funnel o embudo de conversión está diseñado para cumplir los objetivos de un producto o servicio. Estos embudos no son estrategias de venta o meramente trucos para que el cliente adquiera algo, sino que, deben verse como un proceso de análisis, un acompañamiento didáctico que resuelve un problema.
¿Por qué se usan los embudos de venta?
Un funnel se podría decir que es igual a organizar y planificar, así que podrás usarlo para diferentes objetivos, por lo que razones para usar un embudo de conversión en un negocio sobran y aquí te compartimos algunas:
- Los embudos ayudan a conocer las necesidades de los clientes.
- Con un embudo de venta puedes reducir el número de pasos que tiene que dar un usuario para convertirse en cliente.
- Podrás ofrecer ofertas con “descuentos exclusivos” para los clientes que sí se interesen en tus servicios o productos.
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¿Cómo se aplican y en qué momento?
Para hacer y poder aplicar un funnel primero deberás entender las bases de tu negocio y que estén bien definidas. Puedes apoyarte de las siguientes preguntas:
- ¿A quién vendes?
- ¿Por qué?
- ¿Cuáles son los pain points de tu cliente potencial?
- ¿Qué servicios y productos vendes?
- ¿Tienes productos fáciles y baratos de comprar y luego otros más costosos? ¿Has definido tus ofertas?
- ¿Estás seguro de que va a funcionar?
Los funnels comenzarán a aplicarse en el momento en que hayas tomado todas las decisiones y trazado un plan para llevarlo a cabo. De esta manera las acciones del embudo irán apareciendo a tu cliente potencial en la medida en que tú hayas trazado el camino que debe seguir.
